Como la mayoría sabéis, el mantenimiento de un barco se realiza en invierno excepto en caso de necesidad (accidentes, etcétera). La razón es simple: la mayoría de las embarcaciones se mueven poco durante el invierno (noviembre-marzo, sobre todo) y el menor uso hace que sea mucho más sencilla la prevención en esta época.

Primero, os daremos la mala noticia, y después la buena, ¿de acuerdo? ¡Vamos, que rápido duele un poco menos! El mantenimiento anual de un barco supone alrededor de un 10% de su coste de adquisición, que se reparte entre el mantenimiento y la reparación de averías por uso y daños ocasionados, por ejemplo, en el casco durante la navegación e incluso en puerto.

Pautas principales de mantenimiento de embarcaciones

#1 Varada anual del barco

Se denomina varar a sacar el barco del agua por los medios adecuados para hacer el mantenimiento necesario. La limpieza y mantenimiento de obras vivas, como se llama este tipo de servicios, se centra en la limpieza de vegetación y fauna marina (como la remora remora, también conocido como barbate o conil) que se adhiere al casco, así como en pintar el fondo.

Los objetivos de realizar este mantenimiento en seco son los siguientes:

  1. Evitar una fuerza de arrastre excesiva, para que los barcos que participen en regatas sean competitivos y el resto no dispare, inútilmente, el consumo de combustible
    1. El barco consume más carburante
    2. Navega a una velocidad menor
    3. Durante la navegación, se notan vibraciones o un mal funcionamiento del motor
  2. Evitar que la flora y la fauna marina obstruya la toma de agua, así como problemas de calentamiento de los motores y averías graves

Mantenimiento de embarcaciones

#2 Realizar los cambios recomendados por el fabricante

Dicho de otro modo, los cambios que todo fabricante recomendará para nuestra embarcación: revisión del motor, cambio de aceite, y evaluación de otros elementos básicos como la bomba de refrigeración, la correa del alternador o los filtros.

#3 Revisión de los elementos no mecánicos

Por un lado, frisas de las escotillas, portillos, ancla, candeleros, bengalas y balsa salvavidas; por el otro, en el caso de un velero, es básico revisar las velas, evaluar el estado de la jarcia y cambiar escotas, drizas y aquellos elementos en mal estado.

#4 Elementos de seguridad y de higiene

Antes de dar carpetazo al año, revisaremos chalecos y otros elementos de seguridad a bordo, y realizaremos una higienización básica para evitar malos olores y problemas derivados en sentina y W.C. En este punto, seremos especialmente concienzudos si vamos a tener el barco parado por varios meses.

¿Se os ocurren algunos consejos más para terminar de preparar una embarcación de cara a la temporada alta?