En Neptuno hemos sustituido nuestros antiguos motores auxiliares de combustión por 3 nuevos motores eléctricos, el cambio climático y la reciente subida de precios de los combustibles fósiles, han hecho que nos replanteemos el uso de antiguos motores de combustión, en el post de hoy os explicaremos los pros y contras de estos nuevos motores eléctricos.
Ventajas y desventajas de los motores eléctricos fueraborda
El motor en cuestión es el Epropulsion, un motor eléctrico que desarrolla una potencia de 1KW lo que equivaldría a unos 3cv en un motor de combustión.
El motor es totalmente silencioso y tiene una de las mayores autonomías del mercado, una duración entre 1:30 a máxima potencia y hasta 36 horas al mínimo régimen, lo que da una media altísima, además siempre podrás saber cuánto tiempo de uso te queda a través de la pantalla situada en la empuñadura del mando.
La batería es de 1276 Wh, es fácilmente desmontable y ligera, te la puedes llevar contigo a cualquier sitio y lo mejor de todo es que flota y es resistente al agua, el tiempo de carga es quizás su mayor handicap, ya que tarda unas 8h en recuperar su carga por completo, estas se cargan con un cargador de 220v o 12v, lo que nos permite cargarla tanto en el barco como en casa.
Peso y dimensiones:
Otra ventaja frente al resto de motores, es el tamaño y peso del Epropulsion, pues el conjunto batería cola-hélice es de un total de 14 kg, una auténtica pluma comparado con los motores de combustión con las mismas características de potencia.
Pero donde más destaca este motor es en su forma de transportar y estibar en el barco, la batería se separa de la cola , dividiendo el motor en 2 partes que se pueden estibar fácilmente dentro del barco o llevártelo a casa, vienen con una práctica mochila, muy bien resuelta ya que no es del tamaño justo si no que es un poco más grande que el motor con lo que puedes aprovechar ese espacio extra para guardar alguna cosa más.
Precio y mantenimiento:
Aquí es donde el Epropulsion se lleva la palma, es cierto que el precio de coste de un motor eléctrico es algo superior al de uno de combustión unos 400/500 euros por encima, pero eso sí, adiós al mantenimiento! con el motor eléctrico se acabaron los filtros, aceites, cargar con gasolina… lo único que tendrás que hacer es desalarlo después de utilizarlo y listo, olvídate de cambiar ánodos por ejemplo.
Tan sencillo como limpiarlo y ponerlo a cargar en un año habrás amortizado el sobrecoste ya que no tendrás que ir a la gasolinera nunca más, ni por supuesto al mecánico.
Y much@s os preguntareis ¿pero la duración de las baterías? pues estamos de suerte ja que la marca nos da una vida mínima estimada de 20.000 horas para un motor de una embarcación auxiliar iremos sobrados.
En conclusión, personalmente era muy escéptico a todo lo eléctrico, quizás por falta de conocimientos o por eso que dicen de que si algo funciona mejor no cambiarlo, pero aquí he de reconocer que el paso al eléctrico ha sido una muy buena decisión.
El fondear en una cala y salir con el dingui sin sentir ningún ruido, ningún humo de escape es un auténtico placer, saber que no estás contaminando el precioso entorno que nos rodea, la facilidad de transportar y estibar el motor y por último pero no menos importante el nulo gasto en mantenimiento y combustible, que a día de hoy no es precisamente económico, son demasiadas ventajas como para no tenerlo en cuenta.
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