El ancla es el único sistema que tenemos para quedarnos más o menos fijos en un punto de la costa sin tener que amarrar o varar la embarcación.
Historia del ancla
Las primeras anclas no eran más que piedras atadas a un cabo. A lo largo de los siglos su diseño fue evolucionando hasta que sobre el siglo V a.C ya tenían una forma muy parecida a las anclas de almirantazgo, la típica que se suele ver en los tatuajes de los marineros. Este fue el principal modelo, hasta que en el siglo XX, aparecieron un sinfín de variantes y nuevos diseños.
Las anclas más populares:
Las anclas más populares en pequeñas embarcaciones y embarcaciones de recreo durante la segunda mitad del siglo XX y principios de los 2000 eran:
La Danforth
Construida con dos largas uñas totalmente planas con una bisagra en la cruz para permitir que se clave tanto de un lado como el otro. Ofrece un buen agarre sobretodo en fondos de arena.
La CQR o de arado
Su nombre se debe a que su única uña tiene forma de arado. El modelo original esta construido con la uña articulada, lo que no ofrece un agarre adecuado. Las versiones más modernas de las anclas de arado están construidas de una sola pieza, el modelo más popular es la Delta.
La Bruce
Se inventó durante los años setenta. Este tipo de ancla estaba destinada al anclaje de grandes plataformas marinas, como las petroleras. Hasta el 2007 no se comercializó para pequeñas embarcaciones. Su forma de garra abierta ofrece un buen agarre sobre fondos blandos.
En general las anclas mencionadas aún se utilizan en las embarcaciones de recreo ya que ofrecen un buen agarre y son relativamente económicas. Sin embargo en algunas circunstancias puede ser complicado que se claven en el fondo marino rápidamente, una característica no muy recomendable si queremos fondear en verano en una playa o cala repleta de otras embarcaciones.
Durante los últimos años han salido al mercado numerosas anclas con unas características de agarre espectaculares. Quizás la más conocida es:
Ancla Rocna
Este modelo diseñado por el navegante neozelandés Peter Smith salió al mercado en 2004 y rápidamente se popularizó en embarcaciones de recreo tanto a motor como a vela.
Todos los veleros de la flota de la escuela náutica Neptuno disponen de una ancla Rocna. Cuando realizamos las prácticas de fondeo en licencia de navegación, patrón de navegación básica y patrón de embarcaciones de recreo, los alumnos pueden comprobar la eficacia de este tipo de anclas.
A parte de la Rocna existen otros diseños modernos con características similares, como puede ser la Manson, la Spade o la Brake. El único inconveniente de estas anclas es su elevado precio en comparación con los modelos más antiguos. Sin embargo si vuestro plan de navegación es hacer travesías y fondeos de varios días es muy recomendable adquirir una ancla de calidad y de reconocida reputación.
Para tener más información sobre el fondeo puedes acceder al post de ¿cómo fondear?. Si estás interesado en practicar y mejorar la maniobra de fondeo, en el club de navegación Neptuno realizamos periódicamente salidas de intensivo de fondeo.